martes, 4 de mayo de 2010

Cruel manipulación

Sé que me quedo corto utilizando el adjetivo cruel, pero es lo primero que se me ha venido a la cabeza y no tengo ganas de pensar en otra cosa que de lo que vengo a hablar ahora.

No hablo de otra cosa que de la manipulación que ejercen diversos medio de comunicación, especialmente la televisión, sobre nuestros débiles cerebros, acostumbrados a tragar todo lo que nuestros ojos ven sin preguntarnos "por qué".
Para explicar esta cuestión me serviré de varios ejemplos, como por ejemplo, valga la redundancia, de algunas series de televisión tipo "Cuéntame" o tipo "Amar en tiempos revueltos". Los que estáis leyendo esto estaréis pensando que si se me ha ido la pinza o qué tendrá que ver con todo esto una serie tan premiada y tan "inocente" como "Cuéntame". Tiene que ver y mucho.
No puede ser que en una serie con tanto índice de audiencia aparezcan cosas como las que aparecen. Obviando los detalles sin importancia como que en cada bar haya una máquina de café poniendo cafés en perfectas tazas (venga, coño, que es 1960, que el café de puchero era lo más moderno que había), nos centraremos más bien en los detalles importantes, como por ejemplo que cada familia tenga su mítico seiscientos aparcado en la puerta de casa, que todos vivan felices y coman perdices, todos los días su barra de pan en la mesa viendo la televisión. Pero coño, ¡que incluso se pegaban sus siestas tan panchos! ¿es acaso esa la puta realidad que vivían nuestros padres y abuelos? quizás la de algunos pocos sí, pero la gran mayoría de familias se las veían putas para conseguir llevarse algo decente a la boca para almorzar, si es que tenían el concepto que tenemos ahora de "almorzar", que ese es otro hilo del que también podríamos tirar. Y eso de tener televisión...pase, pero coño, que tener un coche en aquella época era como, qué se yo, tener un yate amarrado en pleno Puerto Banús. Que sí, que también algunos lo tendréis, quién sabe.
Si quereis que resuma, "Cuéntame" sería lo equivalente a que ahora, en el año 2010, hagamos una serie para intentar reflejar la realidad cotidiana de cada ciudadano y el protagonista de la serie sea Jaime de Marichalar, que las vacaciones típicas sean todos los veranos en Mallorca y que en la puerta de casa tengan un Porsche Challenge de 340 cv. Vamos hombre...y no pasaré a hablar de "Amar en tiempos revueltos" porque en cuanto ví a una mujer con un vestido que bien se podría comprar ahora la mismísima Duquesa de Alba cambié de canal en un acto reflejo.

Pero bueno, hay que decir que nosotros no somos los únicos seres manipulados, en los años 60 - 70 la manipulación psicológica era aún más dura, con películas del tito Alfredo Landa, como por ejemplo la graciosísima (ay que me troncho de risa) "Vente a Alemania, Pepe". Sí señor, la más real imagen de la emigración española de los 60. 100 % realidad, 0 ficción...me parto y me mondo.
He aquí el cartel de la dichosa peliculita:

Miradlo al tío, pero qué feliz que se va para Alemania a trabajar, con su maletita y su carita de cumpleaños. Lo peor es que hay gente que sigue pensando que todo el mundo se iba a sí de feliz cuando emigraba para ganarse cuatro duros trabajando 48 horas al día, que a lo mejor en España como norma general tenemos los días de 24 horas, pero allí de lo explotados que estaban nuestros antepasados los días parecían semanas.
Hagamos una comparación con algunas imágenes REALES de la emigración española en los años 60:



Pero esto no es lo peor, lo peor es que parecemos olvidar demasiado pronto todas estas imágenes, de las que no hacen más de 50 años, y que ahora, cuando vemos llegar a España numerosas pateras repletas de inmigrantes, soltamos comentarios y decimos tantas barbaridades que me dan ganas de llorar. ¿Acaso éramos nosotros más limpios, más inteligentes o simplemente superiores en algún aspecto a los que vienen ahora a nuestro país? Volvamos a hacer comparación:


=


Pero...¡si somos idénticos! es más, nosotros estábamos aún más hacinados que ellos. Aunque bueno, a decir verdad si que hay una diferencia: ellos vienen en patera, nosotros íbamos en tren, pero vamos, más o menos igual de apretaditos que ahora, y todos, absolutamente todos, con una mano delante y la otra detrás.

Lo que quiero decir con todo esto es que me produce mucha pena que la gente sólo mire hacia adelante y olvide el pasado. Hay un dicho por ahí que dice que ni el futuro ni el presente existen, que sólo existe pasado, ya sea cincuenta años atrás o hace sólo un minuto, todo lo que vivimos es pasado y más pasado. Y es que olvidamos demasiado pronto lo que hemos sido, lo que he hemos sufrido y lo que una cantidad de hijos de puta nos han hecho pasar. Como bien dice uno de mis profesores en la facultad, si el infierno no existe debería existir, sólo para que una gran cantidad de indeseables y de innombrables se pudrieran en él.

En fin, nosotros seguiremos siguiendo series, viendo películas sin preguntarnos si de verdad todo lo que se nos cuenta es la pura realidad, y las altas esferas seguirán dando premios y más premios a estas basuras televisivas y cinematográficas. Nosotros a lo nuestro, a nuestra crisis, a seguir despotricando contra un partido u otro, sin darnos cuenta de que solo somos marionetas para una sociedad en la que no hemos elegido vivir, pero que aceptamos sin más dilación.

Sin más, sed felices, nosotros que podemos. Seamos felices por todos aquellos que no pudieron, por todos aquellos a los que un balazo en la nuca no les dejo ni siquiera intentarlo. Comamos, por todos aquellos que no tenían ni para una barra de pan y bebamos por toda la sed acumulada durante años y años. Nosotros tampoco hemos elegido esta vida, sólo ha sido un simple golpe de suerte tener una familia que nos quiere y protege y un techo donde dormir, sin pasar penurías para comer y beber todo lo que se nos antoja. Así que no presumamos tanto de vivir como vivimos, como ya he dicho, es sólo un simple golpe de suerte...

1 comentario:

  1. Conclusión: tira la tele por la ventana!!
    Deberían organizar una especie de concurso, a ver quien tira la tele más lejos o algo así. Y no solo la tele...si le echas un vistazo a la prensa o la radio, más de lo mismo...y nosotros, venga a tragar.
    Me quiero ir a la isla de Lost!!!

    ResponderEliminar